martes, marzo 24, 2009

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A la izquierda no hay nada.

2 comentarios:

H dijo...

Yo entiendo que el amor entre partes privadas tiende a terminar. Es mas, esta bien que asi sea.

Ahora convengamos que el amor con la politica deberia ser aunque sea como fachada, un incondicional duradero.

Al fin y al cabo a la derecha tampoco hay nada, por lo menos amor, bases, continuidad.

¿justo ahora hay que ser caprichosos y sentirse desilucionados?

Estamos grandes, ni que fuera la primera vez que la politica no funciona. De hecho: porque la politica vuelve a funcionar, recrude el miedo de los desamparados de la inseguridad. Las vallas que gobiernan HSBC nunca se fueron. ¿Eso acaso no significa nada?

No hay tiempo para la derrota. Si tienen miedo, entonces a la derecha y a las señoras hay que darles razones para que tengan terror, no miedo: terror.


Y bueno, mañana a la plaza.

Silvio Astier dijo...

This I sat engaged in guessing, but no syllable expressing
To the fowl whose fiery eyes now burned into my bosom's core;
This and more I sat divining, with my head at ease reclining
On the cushion's velvet lining that the lamp-light gloated o'er,
But whose velvet violet lining with the lamp-light gloating o'er,
She shall press, ah, nevermore!

(párrafo 13, The Raven, E. A. Poe)